Ermita de San Nicolás de Bari
En un paraje sosegado cercano al río Cámaras, junto a los restos de un antiguo cementerio, se encuentra la ermita de San Nicolás de Bari en Azuara. Una construcción de finales del siglo XII, de pequeñas dimensiones y nave rectangular, que representa el estilo románico tardío.
La puerta de acceso presenta jambas de derrame y doble columna a cada lado, y está protegida por un simple voladizo sostenidopor ménsulas talladas en piedra creando un conjunto de gran armonía. El edificio se levanta sobre una planta de una sola nave de trestramos, presbiterio y ábside semicircular, que se pueden apreciar claramente en el exterior. Son visibles en el exterior los elementos estructurales, construidos en piedra sillar, y el pórtico de acceso al templo, enmarcado en un arco de medio punto, de sencilla pero hermosa decoración en los capiteles y las arquivoltas.
Pinturas góticas únicas en la zona
Si por algo destaca San Nicolás de Bari es por su ciclo pictórico interior, muy bien conservado. Según los estudios históricos, esta decoración data de los siglos XIV y XV y no solo cubría la cabecera del templo, sino tambié los muros y bóveda del tramo de la nave próximo al presbiterio. Fueron descubiertas en la restauración del templo en 1988 y son uno de los conjuntos de pintura mural más destacados de los que se conservan en la provincia de Zaragoza al sur del río Ebro.